Una fiesta misteriosa en una isla paradisiaca a la que solo unos pocos escogidos han sido invitados. Así arranca la serie ‘Bienvenidos al Edén’, una de las principales apuestas de Netflix para esta temporada. Pese a la diversidad de opiniones por parte de la crítica, la producción se ha colocado como la más vista en España. En este thriller los paisajes de Lanzarote se convierten en un personaje más.
«Zoe no se lo piensa dos veces cuando recibe una invitación para asistir a una fiesta exclusiva en una isla remota. Pero la celebración no es lo que ella se esperaba». Con esta breve sinopsis, Netflix lanzó el pasado 6 de mayo la serie Bienvenidos al Edén.
Creada por Joaquín Górriz y Guillermo López para la conocida plataforma internacional de streaming, está protagonizada por un reparto coral compuesto por Amaia Aberasturi, Amaia Salamanca, Belinda y Albert Baró, entre otros.
Como ya empieza a ser habitual, el espectador canario que se disponga a ver los ocho capítulos de la primera temporada de esta producción recomendada para mayores de 16 años descubrirá en seguida que ese Edén es, en realidad, la isla de Lanzarote. Pese a que las críticas no han sido del todo buenas, lo cierto es que esta semana Bienvenidos al Edén lideraba ya el top 10 de las series más vistas en nuestro país. Y ahí no para la cosa, se ha situado entre las más populares en diversos países como México o Perú.
Aunque fue parcialmente filmada en espacios de Cataluña y Teruel, Lanzarote es el escenario principal de este thriller de Brutal Media. Sus espectaculares paisajes son, de hecho, un personaje más.
Según explicaron recientemente los responsables de la producción, la isla de los volcanes cumplía a la perfección las exigencias de la trama: tiene una imagen paradisiaca pero a la vez está cargada de misterio.
Localizaciones
La playa de El Caletón Blanco, en Órzola –localidad costera dependiente del municipio de Haría– es una de las protagonistas de la serie.
La otra de las playas conejeras que se pueden descubrir en esta serie es la de Montaña Bermeja, en el municipio sureño de Yaiza. Se trata de una espectacular playa de arena negra que se distingue rápidamente de las habituales calas de arena blanca a las que la Isla tiene acostumbradas al visitante.
Estas playas lanzaroteñas se mezclan con algunas zonas catalanas como la Playa de Malgrat del Mar o la Cala Treumal, en Lloret de Mar. Según detalló el equipo de producción, algunos interiores y exteriores se rodaron también en la zona de Barcelona.
Pero no todo es costa. Bienvenidos al Edén es una buena muestra de los espectaculares perfiles volcánicos de la más oriental de las Islas. Algunos de esos parajes son los del Volcán del Cuervo, en Tinajo, y Montaña Maneje, en Arrecife. Tampoco podía faltar uno de los espacios más conocidos de la Isla: la Cueva de los Verdes, en Haría. Es uno de los centros turísticos más visitados: una impresionante formación natural en forma de túnel formado por el Volcán de la Corona y uno de los más extensos e interesantes del planeta. Por último, también se rodaron muchos de los planos en el barranco de las Piletas.
Actriz canaria
Pero los paisajes no es lo único canario de esta serie. La actriz grancanaria Lola Rodríguez forma parte del elenco e interpreta a Maika. Conocida por su activismo dentro del colectivo Lgtbiq, participó también en la serie La Veneno, donde interpretó a la escritora y periodista Valeria Vegas. Pese a que aún no está confirmado, todo parece apuntar a que Netflix rodará una segunda temporada de Bienvenidos al Edén. Al menos eso se desprende del final de la primera temporada.
