Música de cámara única en Europa

Quantum Ensemble es una formación atípica. Desde hace siete años afronta con genialidad un repertorio que ya conforman más de 200 obras. Y lo hace con doble vocación: ofrecer composiciones clásicas acompañadas de temas contemporáneos. Uno de sus objetivos es demostrarle al público que, como pasaba ya en los tiempos de Beethoven, hoy en día es posible escuchar la música que los compositores actuales están creando.

Formación residente en el Auditorio de Tenerife, tiene otras características que la hacen única. Sus fundadores, el clarinetista Cristo Barrios y el pianista Gustavo Díaz-Jerez, se rodean de los mejores en cada uno de los siete conciertos que conforman su temporada. De esta forma, cuentan con un nutrido grupo de artistas asociados que desde hace años colaboran con ellos. "Y no son solo de carácter local o nacional, sino también internacional", explicó ayer Barrios. Ese listado de colaboradores habituales incluye nombres como los del violonchelista Asier Polo, la violinista Cecilia Bercovich o la joven mezzosoprano Marta Fontanals-Simmons. "Finalmente, además de ellos, contamos con un tercer círculo de músicos y formaciones que colaboran con nosotros", añadió Barrios. Como ejemplo en este ámbito, el músico tinerfeño citó la reciente visita de Romain Guyot.

Por este motivo, Quantum Ensemble siempre es distinta y es siempre igual. Aunque contradictoria, esta afirmación es cierta porque la formación de cámara tinerfeña mantiene el mismo espíritu en todos sus conciertos a la vez que se nutre de las especificidades de los distintos instrumentos, solistas y programas que desarrollan en cada uno de ellos. "Hace poco he estado estudiándolo y resulta que solo somos seis las formaciones en toda Europa que cuentan con estas características", explicó Barrios.

Esa selección de artistas y las obras que afrontan en su ya extenso repertorio los hacen únicos a muchos niveles y ahora el objetivo de Quantum Ensemble es llevar todo ese esfuerzo a los escenarios internacionales. "Hacer música de cámara en España es tremendamente complicado", reconoció Barrios. "Ya hemos pasado por la mayoría de las sociedades filarmónicas del país y ahora la intención es lanzar la formación a un público más internacional", recalcó.

Saltándose "el peldaño" de las dificultades de contratación en España, Quantum Ensemble aspira a que todo ese trabajo intenso y de calidad llegue a escenarios de otras latitudes. "Dentro de nuestros conciertos siempre hay unos minutos, entre diez o veinte, dedicados a un repertorio más exigente, a lenguaje más avanzado. Por eso quizás a veces nos cuesta encajar en las programaciones", reconoció el clarinetista. La respuesta del público, por contra, es siempre "tremendamente positiva" respecto a ese repertorio más avanzado. "Poco a poco hemos ido educando a nuestro propio público", festejó.

Los conciertos de Quantum son siempre diferentes, también, porque se alejan de esa especie de rigidez con la que siempre cargan este tipo de formatos. Organizan recitales donde un experto siempre introduce el programa, abren sus ensayos a los colectivos más vulnerables y no dejan pasar la ocasión de los descansos para mezclarse con la audiencia e intercambiar pareceres. Pese a la obligada cancelación de fechas de las próximas semanas, esperan poder reprogramar esos conciertos a medio plazo.