Edei Martín, el tinerfeño que conquistó a Risto Mejide: “Todo lo que viví esa noche fue épico, un carnaval distinto”

Aún con la resaca emocional del fin de semana de Piñata, el disfraz diseñado para la fiesta chicharrera continúa causando revuelo en redes, hasta llegar al propio presentador

Edei Martín, el doble de Risto en el Carnaval de Tenerife, durante su entrevista con el popular presentador este lunes.

Edei Martín, el doble de Risto en el Carnaval de Tenerife, durante su entrevista con el popular presentador este lunes. / @edei_martin

No fue hasta que se puso las gafas y se miró al espejo cuando cayó en la cuenta del verdadero parecido. El tinerfeño Edei Martín viralizó su disfraz de Risto Mejide durante el Carnaval chicharrero. Su impacto en Tik Tok lo llevó directo al presentador, que le otorgó el pase de oro en el programa de Cuatro Todo Es Mentira. Todavía no piensa en su próxima fantasía. Aún quedan carnavales por el resto de la Isla a los que planea acudir ataviado con su popular disfraz. 

“Nunca esperas que un disfraz llegue tan lejos”, reconoce en conversación con EL DÍA. La gente que pasaba cerca comenzó a fotografiarlo, pero fue @ruthramos297, usuaria de Tik Tok la que consiguió más de dos millones de visitas en su vídeo. Comenta que todo fue paso a paso. “Fue de plataforma en plataforma hasta que Risto me contactó”, explica. 

Tras probarse las gafas de su sobrino durante una comida, su familia encontró el parecido y la broma se contagió a las mesas que estaban alrededor. Recuerda que “también quería algo que siguiera la temática del Carnaval de este año, por eso, encajaba a la perfección”. Finalmente, terminó preparándolo “muy a la carrera”. 

El 'Risto Mejide' más carnavalero, triunfa en el Carnaval de Tenerife

Tik Tok de @ruthramos297

Cartones, una silla de camping y un andador

“Tuve que comprar hasta la ropa”, desvela. Para la mesa, utilizó unas cajas y un andador, comprado para un disfraz de anciano, que tenía por casa. Incluyó también una silla de camping, leds, baterías y otros elementos para detalles más trabajados, como el botón para el pase o la equis. 

Las gafas, finalmente, no son las de su sobrino. La verdadera transformación, recuerda, comenzó cuando se cortó el pelo. Una vez se miró al espejo con la indumentaria completa, no daba crédito. “Hasta yo noté el parecido, era sorprendente. Cuando me vio mi novia no podía creerlo”, asegura. 

“El parecido era sorprendente hasta para mi. Me miré al espejo vestido y con las gafas y flipé”

Llegó a la fiesta y no tuvo tiempo para nada más. “Me giré y la gente empezó a decirme que quería enseñarme sus actuaciones”, afirma. La que más recuerda es la de dos bailarinas. Bromea con que incluso tenían una coreografía muy bien preparada. “Yo alucinaba”, recalca. 

Era el momento de tomar decisiones y otorgar o no el pase. Explica cómo quienes estaban alrededor en ocasiones aclamaban el pase de oro o dejaban fuera a alguno de los participantes. “Pese a que lo gritaban, yo solo tenía el botón blanco, lo pulsaba y a la gente le valía igual. Era muy gracioso”. 

“Hasta ese día no pensé en el parecido. Ahí comencé a creérmelo y me preparé el papel”, detalla. Eso sí, Edei quiere dejar claro que su disfraz está hecho “siempre desde el respeto”. Para clavar su actuación le bastó con ver un par de vídeos, repasar voces, gestos y caras.

Afirma que aún queda mucho carnaval, por ejemplo, en Candelaria. Amenaza con superarse el próximo año o, quién sabe, quizás podría llegar a convertirse en un nuevo personaje popular del Carnaval.