Sedes institucionales, comercios y casas refuerzan el blindaje antiorines

Edificios públicos y privados mejoran las protecciones con la utilización de materiales metálicos para evitar las micciones, una ‘costumbre’ difícil de erradicar en los mogollones

Comercios de Santa Cruz blindados para el Carnaval en la calle.

Comercios de Santa Cruz blindados para el Carnaval en la calle. / E. D.

Daniel Millet

Daniel Millet

Administraciones públicas, empresas y comunidades de vecinos perfeccionan cada año el blindaje antiorines de sus edificios y otros espacios ubicados en el cuadrilátero carnavalero. De los plásticos y los cartones se ha pasado a las estructuras de metal y madera, cada vez más macizas. Operarios acababan este viernes algunas de estas protecciones, el mismo día que comienzan los bailes en las calles chicharreras.

Los jardines de la plaza Weyler, la escultura del Chicharro o la plaza de San Francisco aparecen este año más blindados que nunca para repeler una costumbre, la de orinar en la calle durante los mogollones, que va a ser muy difícil de evitar a pesar de que cada año mejoran los medios municipales para minimizarlo. Por ejemplo, el Ayuntamiento santacrucero ha desplegado este año por todo el recinto fiestero 348 baños portátiles, una cifra similar a la del año pasado. Además, el que haga las necesidades en plena vía se expone a multas que pueden llegar a los 750 euros.

Capitanía y el Parlamento

También se han protegido con vallas, puertas o hasta verdaderos muros metálicos otras sedes institucionales como Capitanía o el Parlamento de Canarias, además de comercios, empresas y edificios residenciales. San José es la calle con más defensas antiorines del centro de Santa Cruz. Pero también abundan en otras zonas como la calle Castillo y los alrededores de la Plaza del Príncipe.

El Ayuntamiento anima a los responsables de los edificios a adoptar estas medidas. Lo asegura Carlos Tarife, concejal de Servicios Públicos. En cualquier caso, lo que más solicita Tarife es «civismo». «Pedimos a la gente que deposite la basura en los contenedores y miccione en los baños portátiles o los propios locales, donde pueden usar los baños si han consumido», recuerda el edil del Partido Popular.

En previsión de que pese a las advertencias y las medidas las mascaritas acaben haciendo lo de todos los años, Servicios Públicos ha desplegado un gran operativo de limpieza. El dispositivo especial se refuerza este año con 55 vehículos y se prevén más de 1.300 jornadas de trabajo para cubrir todos los actos en la calle, que aparecen tras los bailes casi como si no hubiera pasado nada. Además, se repartirán vasos reutilizables y habrá patrullas ambientales para la sensibilización en la separación de residuos. El año pasado se retiraron más de 400 toneladas de residuos. Los responsables municipales alaban que el Carnaval de Santa Cruz de Tenerife sea el más seguro del mundo. Ahora también persiguen que sea el más limpio. Lo dijo el concejal de Fiestas, Javier Caraballero: «Tenemos que conseguir que nuestro Carnaval sea la fiesta más limpia, la que más recicla y la que genera menos residuos».

Mejor prevenir...

Abbas Moujir, secretario general de la Federación de Áreas Urbanas de Canarias, asegura que las estructuras de defensa de tiendas y negocios de restauración «se han ido fortaleciendo» con el tiempo «a través de la utilización de materiales metálicos». «El principal problema son las micciones y, a veces, el agua de los operativos de limpieza que entran en los comercios». Minimiza la incidencia de los actos vandálicos, que asegura son «minoritarios». En cualquier caso, Moujir aconseja adoptar medidas porque «las consecuencias pueden salir mucho más caras».