Hasta las diez de la mañana, la tranquilidad reinó en la capilla ardiente de Jerónimo Saavedra. Con el paso de las horas, sin embargo, el Salón Dorado de las Casas Consistoriales se fue llenando de quienes lo conocieron en su actividad política, sobre todo, y ciudadanos anónimos quehan querido presentarle sus respetos. Más allá de sus logros políticos -presidente autonómico, ministro y alcalde-, su "humanidad", "alegría" y el modo tranquilo y certero que tenía para afrontar el día a día fueron las cualidades que en mayor medida se atribuyeron a su persona.
El trasiego de personas ganó intensidad a lo largo de la mañana y sobre el mediodía moverse por la sala, de la que la familia y amigos más cercanos no se han apartado, se tornaba más y más complicado.
Último adiós al primer presidente de Canarias en el Salón Dorado de las Casas Consistoriales
José Carlos Guerra
Hasta las diez de la mañana, la tranquilidad reinó en la capilla ardiente de Jerónimo Saavedra. Con el paso de las horas, sin embargo, el Salón Dorado de las Casas Consistoriales se fue llenando de quienes lo conocieron en su actividad política, sobre todo, y ciudadanos anónimos quehan querido presentarle sus respetos. Más allá de sus logros políticos -presidente autonómico, ministro y alcalde-, su "humanidad", "alegría" y el modo tranquilo y certero que tenía para afrontar el día a día fueron las cualidades que en mayor medida se atribuyeron a su persona.
El trasiego de personas ganó intensidad a lo largo de la mañana y sobre el mediodía moverse por la sala, de la que la familia y amigos más cercanos no se han apartado, se tornaba más y más complicado.
Último adiós al primer presidente de Canarias en el Salón Dorado de las Casas Consistoriales
José Carlos Guerra
Hasta las diez de la mañana, la tranquilidad reinó en la capilla ardiente de Jerónimo Saavedra. Con el paso de las horas, sin embargo, el Salón Dorado de las Casas Consistoriales se fue llenando de quienes lo conocieron en su actividad política, sobre todo, y ciudadanos anónimos quehan querido presentarle sus respetos. Más allá de sus logros políticos -presidente autonómico, ministro y alcalde-, su "humanidad", "alegría" y el modo tranquilo y certero que tenía para afrontar el día a día fueron las cualidades que en mayor medida se atribuyeron a su persona.
El trasiego de personas ganó intensidad a lo largo de la mañana y sobre el mediodía moverse por la sala, de la que la familia y amigos más cercanos no se han apartado, se tornaba más y más complicado.
Último adiós al primer presidente de Canarias en el Salón Dorado de las Casas Consistoriales
José Carlos Guerra
Hasta las diez de la mañana, la tranquilidad reinó en la capilla ardiente de Jerónimo Saavedra. Con el paso de las horas, sin embargo, el Salón Dorado de las Casas Consistoriales se fue llenando de quienes lo conocieron en su actividad política, sobre todo, y ciudadanos anónimos quehan querido presentarle sus respetos. Más allá de sus logros políticos -presidente autonómico, ministro y alcalde-, su "humanidad", "alegría" y el modo tranquilo y certero que tenía para afrontar el día a día fueron las cualidades que en mayor medida se atribuyeron a su persona.
El trasiego de personas ganó intensidad a lo largo de la mañana y sobre el mediodía moverse por la sala, de la que la familia y amigos más cercanos no se han apartado, se tornaba más y más complicado.
Último adiós al primer presidente de Canarias en el Salón Dorado de las Casas Consistoriales
José Carlos Guerra
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El trasiego de personas ganó intensidad a lo largo de la mañana y sobre el mediodía moverse por la sala, de la que la familia y amigos más cercanos no se han apartado, se tornaba más y más complicado.
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José Carlos Guerra
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José Carlos Guerra
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El trasiego de personas ganó intensidad a lo largo de la mañana y sobre el mediodía moverse por la sala, de la que la familia y amigos más cercanos no se han apartado, se tornaba más y más complicado.