La Agencia Tributaria se incautó de 1.300 kilos de hachís arrojados al mar por cuatro lanchas en una persecución durante la cual los agentes tuvieron que efectuar varios disparos de advertencia, ya que una hizo maniobras para embestir a la patrullera.

La Agencia Tributaria explicó que la operación se inició el lunes cuando medios de vigilancia aérea de este organismo divisaron cuatro embarcaciones semirrígidas en aguas internacionales al sureste de Punta Europa y que se dirigían a las costas españolas. Tres de ellas iban cargadas de bultos como los utilizados usualmente en el tráfico de hachís.