En España, todavía más de la mitad de los pacientes infectados por el virus del sida (VIH) también lo están por el de la hepatitis C (VHC), una cifra muy superior a la media de la Unión Europea, que se sitúa alrededor del 30%.

Así lo indicó ayer el doctor Santiago Moreno, jefe de Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal en la V Reunión Coinfect, en la que han participado numerosos especialistas.

Estos datos ponen de manifiesto la necesidad de tratar a estos pacientes de ambas enfermedades con las terapias disponibles, según explicó el experto. El hígado de los pacientes coinfectados por el virus de la hepatitis C y el VIH se deteriora más rápido en éstos que en los infectados sólo por el VHC, por lo que es esencial iniciar cuanto antes el tratamiento.

"Por ahora, el tratamiento habitual indicado para los pacientes coinfectados es la administración de interferón pegilado y ribavirina durante 48 semanas", expuso Moreno. Aún así, apuntó que existen nuevas líneas de investigación que se centran, fundamentalmente, en la manera de curar al máximo número de pacientes con el mínimo de toxicidad y morbilidad asociadas.

Mejorar la respuesta

El doctor argumentó que la duración óptima del tratamiento y la prevención de las toxicidades de la medicación han centrado, y siguen centrando, la atención de los investigadores clínicos. "Sin duda alguna, la búsqueda de nuevos fármacos llena ahora la agenda de investigadores con la intención de mejorar la respuesta", comentó.

En estos momentos, según dijo, en los pacientes coinfectados por los genotipos 2 y 3 se obtiene una tasa de respuesta al tratamiento de hasta el 70-80%, un dato positivo que se contradice con el elevado número de enfermos que no se tratan del VHC.