El continente: carros con mulas, aljibes, charcas como la de Tristán, chorros -dos-, el cuartel de la Guardia Civil y fincas (las del Banco o el Fiscal). Y el contenido: gentes de todas las islas que llegaron para dar carácter a un barrio, el Camino del Hierro, marcado por la geografía del barranco. Fina Fuentes, vecina "de toda la vida", valora: "Vinieron de Lanzarote, como yo, de Fuerteventura, de La Gomera...". Este mundo rural derivó con el tiempo en el actual paisaje urbano.

Recuerda nuestra protagonista a personajes como "Luis el gomero" o lugares -"la venta y la molienda de Don Juan", al inicio de la subida- como ejemplos de una forma de vida extinta. Añade "la venta de Francisco Canino, hombre bueno y amable; la de Natalio y Francisca, la de Manolo y María o los surtidores de vino y petróleo. Y mujeres como Benigna, Evelia y Frasca".

Fina relaciona escenarios ya desaparecidos: "El puente que llegaba a Vistabella y cruzaba la Finca del Banco" o "el precioso chalet expropiado para hacer la iglesia y las 120 Viviendas". Y sus caminatas en verano "para buscar el hielo a la fábrica, entre Ballester y el Perú". O a la cercana Cervecera para obtener el apreciado bagazo, las sobras de la cebada, que da un característico olor al entorno. "Para dar de comer a las cabras", explica. Sin olvidar la próxima Litografía Romero.

A su hermano Carlos, "vivito y coleando", el barrio le debe, asegura, "hasta los nombres de la calles porque de Primera, Segunda o Tercera pasaron, debido a su pasión por el mundo guanche, a Añavingo, Guasiegre, Tamadaya, Orchilla...".

Fina sigue su repaso: "Julio, trabajador del Banco Hispano, era conocido como el maestro. En su casa de la calle Tamadaya daba clases y se impartían misas, primeras comuniones o confirmaciones, en la época del obispo Luis Franco Cascón. Su mujer, Goya, ejercía de maestra de ceremonias".

También entonces, apunta Fina, "había necesitados, pero menos y con otro perfil. Lo que no cambia es la solidaridad, como la de los curas de las Escuelas Pías que traían alimentos al barrio. Los catequistas preparábamos los paquetes para el reparto. Pero, como reza la parábola, que tu mano izquierda no sepa lo que hace la derecha,".

El que el parque Cuchillitos de Tristán "sea para los perros" es una causa por la que lucha hoy, "con más dedicación a mi barrio, muy abandonado", proclama Fina. "Me encantan los perros -ahí están a sus pies Ofra y Maxi- pero había otros lugares cercanos donde ubicarlos. Lo peor son los dueños". Denuncia un coste de "más de ocho millones de euros, sin resultado acorde. La pendiente y las trampas del piso propician resbalones y caídas, sobre todo de mayores".

Otro caballo de batalla "es la falta de poda. Un ejemplo es el edificio Alsaca III, en Añavingo, donde no entra la luz natural por la altura de las ramas". Mientras camina enumera los puntos "descuidados", la falta de espejos para el tráfico, la escasa limpieza de las calles o el pavimento reventado. Dos casas con problemas: "En una habitada de Tamadaya hay grietas y riesgo, más con las lluvias. Otra, en Añavingo, está abandonada y con humedades".

Para concluir, siempre crítica: "Donde terminan las casas, cerca del Liceo Francés, hay una zona desprotegida y sin seguridad que da directamente al barranco. Solicito medidas antes que ocurra una desgracia y algún niño caiga al vacío". Fina, genio y figura.

Nombre y situación

Por donde no subían los taxis, lleno de calles empedradas, baches y hoyos, al borde del barranco del Hierro. Puede ser el origen del nombre de un núcleo que limita con Ballester, la Carretera de El Rosario y llega hasta el Bar Castro, en la calle Teno, casi ya la avenida de los Príncipes.

Población

1.206 censados en 2014.

Reseña histórica

Aunque ya antes había casas, constituye uno de los primeros crecimientos residenciales promocionados por las instituciones públicas en los 50 del siglo XX. Asentamiento obrero popular, a partir de viviendas unifamiliares de autoconstrucción. Luego llegarían urbanizaciones como Tristán o la promoción social de las 120 viviendas, frente al núcleo original, de trama reticular, calles estrechas y pocos espacios libres.

Movimiento vecinal

Un nombre: Carlos Fuentes Tabares, valedor del barrio y sus vecinos. Un auténtico "conseguidor", según su hermana Fina. Referente del incipiente movimiento vecinal vinculado a ATI y a Manuel Hermoso. Promotor de la iglesia, presidente y fundador de la AV Timanfaya.

Lugares de interés

Tiene cerca una parada del tranvía denominada Chimisay que se ubica en la calle Pedro Suárez, un nuevo espacio abierto a raíz de la construcción del metro ligero. Ahí se concentran centros educativos. Aún se conserva la antigua sede social del Hierro, equipo de fútbol de renombre que tuvo su campo donde hoy están las 120 Viviendas.

Fina Fuentes

De catequista a activista social y política, a partir de Ben Magec Ecologistas en Acción. Soltera y "sin manusiar", dice divertida Fina Fuentes Tabares. Luchadora y de izquierdas, llegó al barrio "con tres meses y medio" desde su Arrecife natal con una amplia familia (siete hermanos). Costurera para sastres de americanas de caballero ("no chaquetera", bromea) fue dependienta de comercio en la calle San José para Galerías Herrera "gracias a mi pequeño conocimiento del inglés". Colaboradora de Cáritas, Fraternidad Católica de Enfermos, Ayuda al pueblo saharaui, donante de alimentos "sin bombo y platillo" y "manifestante por las causas dignas".

LA RADIOGRAFÍA