El Juzgado Nº 1 de La Orotava acordó recientemente el archivo de la denuncia formulada por la Coordinadora de El Rincón contra las autoridades y funcionarios que intervinieron en la concesión de la licencia de demolición de la casa del número 56 de la calle Calvario y dio el visto bueno a su derribo, que ya se ha ejecutado.

El inmueble afectado "carece de valor patrimonial", según subrayó el edil villero de Ordenación del Territorio, Narciso Pérez (CC), quien añadió que "sí se encuentra dentro de la delimitación BIC del número 54 de la calle, lo que supone que cualquier actuación en este ámbito debe ser autorizada por el Cabildo".

El edil aseguró que "desde la Concejalía de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de La Orotava se han cumplido todos los trámites preceptivos y necesarios para garantizar que el proyecto que se ejecuta no causara ningún daño patrimonial".

"El 4 de septiembre de 2008 se recibe la autorización del Cabildo de Tenerife, incluido el acuerdo de la Comisión Insular de Patrimonio, y posteriormente se concede la oportuna licencia", destacó Pérez.

"Frente a este proceso, donde se siguieron todas las garantías legales antes de conceder la licencia, la Coordinadora, en un intento más de manipular la realidad, acusó a los funcionarios y cargos públicos que intervinieron de un delito contra el patrimonio histórico y prevaricación", lamentó.

Casi dos años después se ha culminado el proceso de investigación de la denuncia y el juzgado decide archivarla y levantar la suspensión cautelar que había dictado sobre la demolición. "Por ello -apuntó Pérez-, la empresa hizo valer el lunes su licencia, legalmente concedida, para iniciar la obra".

"Ha quedado demostrada la legalidad de todo el proceso, pero atrás han quedado casi dos años en los que se ha acusado injustamente a las personas que intervinieron en el expediente", concluyó Pérez.