El ministro de Educación, Cultura y Deporte en funciones, Íñigo Méndez de Vigo, ha reconocido que se han modificado los borradores de los decretos de Secundaria tras escuchar a la comunidad educativa, al mismo tiempo que ha asegurado que, a pesar de las modificaciones, se mantiene el espíritu establecido en la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) para estas pruebas finales.

"Dije que venía a escuchar y a dialogar y lo primero que hice fue separar la evaluación de Sexto de Primaria. Lo acordamos en la Conferencia Sectorial de agosto, y en la otra escuché a todo el sector educativo y lo que me han dicho. Por tanto he presentado una propuesta de desarrollo de la misma que creo que está en la línea de lo que quiere la comunidad educativa", ha subrayado el responsable de Educación en declaraciones a los medios, al término de un acto celebrado contra el acoso escolar en la sede de su departamento.

Según ha defendido, el objetivo es que los docentes y las familias estén tranquilos y sepan que la educación es "importante", con el fin último de sellar un pacto nacional por la educación.

EN CONSONANCIA CON LA LOMCE

Preguntado por las razones que han llevado al ministerio a dar esta ''marcha atrás'' en sus exigencias para las pruebas finales de ESO y Bachillerato, Méndez de Vigo ha insistido en que los "cambios" y la nueva propuesta formulada están "en plena consonancia con la LOMCE", y sus objetivos de reducir el abandono escolar temprano y mejorar la calidad del sistema educativo.

"Dije que venía a escuchar y a dialogar. Escuchar significa tomar en consideración lo que escuchas y eso es lo que hemos hecho", ha insistido.

Sobre las evaluaciones de Sexto de Primaria que se están efectuando desde este miércoles en Cataluña, el ministro en funciones ha recordado que esas pruebas finales se desarrollan en la comunidad autónoma desde hace años, un hecho que ve "necesario" porque "cualquier sistema que tenga que mejorar tiene que saber cómo hacerlo".