El presidente catalán, Artur Mas, dijo ayer que el caso del expresident Jordi Pujol es "estrictamente personal" y "no va más allá" del ámbito familiar, por lo que no le afecta ni a él, ni a su Govern, ni a CDC, a los que desvinculó también de la trama de las ITV por la que está imputado Oriol Pujol.
Mas compareció en la comisión de investigación del fraude y evasión fiscal y prácticas de corrupción, creada en el Parlament a partir del caso del expresidente catalán Jordi Pujol, del que se ha desvinculado por completo, aseverando que no conocía el fraude fiscal confeso del expresident ni las presuntas prácticas corruptas de Oriol Pujol.
En la primera comparecencia de un president en una comisión de investigación, Mas matizó que Pujol no ha dejado de ser su "padre político", pese a la "decepción" que tuvo cuando conoció que había ocultado fondos en el extranjero, pocas horas antes de que se hiciera público, según su versión.
Las aseveraciones de Mas levantaron las críticas unánimes de la oposición, que manifestó incredulidad por el hecho de que alegue no saber nada cuando fue secretario general de CDC, además de conseller y sucesor de Pujol. El más contundente fue el PPC, que solicitó directamente la dimisión del presidente catalán.