El portavoz de Economía del grupo socialista en el Congreso, Valeriano Gómez, ha pedido al Gobierno que utilice las sucursales de Bankia para que el Instituto de Crédito Oficial (ICO) pueda ofrecer sus líneas de préstamos a las pymes y a los autónomos.

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y Valeriano Gómez se han reunido hoy con los representantes de las organizaciones de autónomos ATA, UPTA, CEAT, UATAE y OPA para analizar el anteproyecto de ley de apoyo a los emprendedores, que hoy aprueba el Gobierno.

Este anteproyecto incluye medidas -algunas de carácter fiscal- para impulsar la actividad por cuenta propia y la creación de empresas, y fomentar su crecimiento, innovación y salida al exterior.

Gómez ha reiterado la propuesta socialista de utilizar 20.000 millones de euros procedentes del rescate europeo a la banca para distribuir créditos a las pymes y ha pedido que además se firme un acuerdo para que la banca nacionalizada, y especialmente Bankia, sea la que facilite los préstamos del ICO.

"Bankia es una institución extendida por todo el conjunto del territorio y el ICO puede estar en cada sucursal para que el crédito esté disponible y sea accesible desde cualquier punto de la geografía", ha dicho, tras recordar que esta entidad ha recibido cerca de 25.000 millones de euros de apoyo público.

El dirigente socialista también ha solicitado al Ejecutivo que "acuerde" con la inmensa mayoría del arco parlamentario la nueva ley de Emprendedores, ya que se tramitará como anteproyecto de Ley y puede ser "concertada" en el Congreso con la inclusión de enmiendas.

Al respecto, se ha referido a los problemas que tienen los autónomos en ámbitos como la tributación o la Seguridad Social y ha pedido que este colectivo tribute cada vez más por los ingresos efectivos que recibe y no tanto por módulos.

"Que el régimen de módulos sólo se limite a las actividades que lo necesiten", ha puntualizado.

Gómez ha lamentado que el colectivo de los autónomos haya perdido 50.000 empleos desde diciembre de 2011 y que la reforma laboral aprobada por el PP no haya tenido "ningún tipo de influencia positiva".

Según ha avanzado, más de 42.000 empresas han tenido que cerrar en 2012 por la contracción del crédito y no han podido mantener su actividad.

"Para salir de la crisis no hay que pedir sólo paciencia sino que se necesita una acción urgente en el crédito", ha añadido.