El presidente sirio, Bachar al Asad, celebró hoy la Fiesta del Sacrificio, una de las principales festividades musulmanas, en la región de Al Qalamún, donde acaba de ser expulsado el grupo terrorista Estado Islámico (EI).

Según informaron medios oficiales sirios, Al Asad hizo las oraciones del alba en la mezquita Sayedna Bilal, de la ciudad de Qara, ubicada a unos 100 kilómetros al norte de Damasco.

Qara se encuentra a unos 20 kilómetros de la zona de la frontera con el Líbano que estuvo controlada por el EI hasta la ofensiva del ejército libanés que forzó a los yihadistas a aceptar el pasado domingo un acuerdo de evacuación al este de Siria.

El jeque Mamún al Qadiri, que pronunció el sermón en la oración, subrayó que la Fiesta del Sacrificio llegó este año "acompañada de una gran victoria" del ejército en Al Qalamún, que fue "coronada" con la visita de Al Asad a Qara, según informó la agencia oficial Sana.

Las visitas de Al Asad fuera de Damasco han sido poco frecuentes durante el conflicto, aunque en los últimos meses se ha dejado ver en ocasiones excepcionales, como festividades religiosas, lejos de la capital.

La Fiesta del Sacrificio, "Aid al Adha" en árabe, es una de las principales celebraciones del islam y recuerda el pasaje bíblico del sacrificio del hijo primogénito de Abraham, quien -según la tradición musulmana- era Ismael.