El defensor del Pueblo de Venezuela, Tarek William Saab, dijo hoy que el líder opositor preso Leopoldo López "no tiene signos" de haber sido "salvajemente torturado", tras señalar que su institución constató la situación en la que se encuentra el político.

"Constató la Defensoría del Pueblo y quedó levantado en acta que el ciudadano Leopoldo López no tiene signos de haber sido, como se dijo, salvajemente torturado, no, no, nada de eso", dijo William Saab al canal estatal VTV, en referencia al vídeo difundido el pasado viernes en el que López grita "me están torturando".

Por otro lado, William Saab manifestó que "está de acuerdo" con que López "pudiera ser objeto de una medida sustitutiva menos gravosa de privativa de libertad" y "pueda ser enviado a su casa", pero aclaró que se trata de "una opinión" que será debatida en "su momento" en el sistema de justicia.

El pasado viernes la esposa del político, Lilian Tintori, difundió un vídeo de 26 segundos en el que López grita "me están torturando" desde dentro de la cárcel militar de Ramo Verde, donde el opositor se encuentra detenido desde 2014 cumpliendo una condena de casi 14 años.

Tras ello, Freddy Guevara, coordinador nacional de Voluntad Popular (VP), formación fundada por López, exigió al ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, que demuestre las condiciones de salud del opositor.

El periódico venezolano "Últimas Noticias" difundió ese viernes en su web un par de fotografías y un vídeo que muestran al opositor encarcelado recibiendo atención médica y alimentos horas después de que se filtrara un audiovisual en el que el político gritaba que estaba siendo torturado.

Amnistía Internacional (AI) pidió el sábado a las autoridades venezolanas investigar "de forma inmediata" la denuncia hecha por López.

Ese mismo día Tintori aseguró que en la cárcel no le permitieron el acceso para ver a su marido.

El político, de 46 años, declarado "preso de conciencia" por AI, fue condenado en septiembre de 2015 como responsable de los disturbios ocurridos al final de una marcha antigubernamental en 2014 en los que murieron tres personas.