El periodista español Ignacio Ramonet sostuvo hoy que los comicios municipales que en tres días se celebrarán en Venezuela "abren un nuevo ciclo" en ese país pues ya ha tomado algo de distancia respecto a la muerte de Hugo Chávez.

"Hoy son elecciones que se hacen en otra vía, que abren un nuevo ciclo. Son evidentemente no determinantes, son municipales, pero cuentan", declaró Ramonet en el marco de la XXVII edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).

Los venezolanos acudirán a las urnas el 8 de diciembre para renovar las 337 alcaldías y los concejos municipales, ocho meses después de las elecciones presidenciales de abril, en la que venció Nicolás Maduro con una escasa ventaja.

Las elecciones se han convertido en una prueba clave para el oficialismo y la oposición, que buscan demostrar cada uno que son mayoría en un país polarizado.

Para Ramonet esos comicios son "muy importantes" sobre todo para el presidente Maduro y los consideró "las primeras elecciones sin (Hugo) Chávez" en el imaginario colectivo.

"Las precedentes eran del 14 de abril pasado pero se situaban en el marco del duelo de Chávez, de la pena, del sufrimiento, como le quieras llamar, o de la alegría para quienes lo detestaban", dijo.

El académico y periodista cree que en las presidenciales de abril aún "estaba muy presente Chávez (1954-2013)", cuya muerte ocurrió el 5 de marzo pasado.

Ramonet recordó que "en España las municipales trajeron la República" cuando la monarquía "se derrumbó con las elecciones del 14 de abril de 1931".

El también presidente de la organización Media Watch Global consideró que, pase lo que pase, "el presidente Maduro seguirá" en su cargo, pero consideró la votación un test de aceptación para él y su Gobierno. "Vamos a ver si la política que hacen desde hace siete meses es aceptada o no por la población", añadió.

Acerca de Chávez señaló que "indiscutiblemente es alguien que dejó y va a dejar una huella importante en la población venezolana" a pesar de haber sido "un hombre contradictorio".

"Tú no puedes hacer eso sin que una pequeña oligarquía pierda algo digamos, de su poder", indicó.

Del "chavismo" dijo que él en lo particular tenía una concepción "positiva" de ese término, alusivo a "la influencia que Chávez ha tenido" durante sus mandatos (1999-2013), y destacó que él lo asocia con la "justicia social".

"Un dirigente que saca a siete millones de personas de la pobreza no creo que sea un criminal. Yo no lo metería en la cárcel por eso. En cambio uno que se llena los bolsillos y deja a su población en la pobreza, ahí sí que plantea problemas", añadió.

Consideró que "probablemente Chávez marca de tal manera a Venezuela que yo digo, un poco como (Juan Domingo) Perón, durante los próximos cincuenta años por lo menos no se podrá hacer política en Venezuela sin referirse al chavismo".

Finalmente consideró que, ante todo, quiere saber cómo reacciona la población a la "guerrilla económica" que se le ha hecho al Gobierno "con el acaparamiento que ha habido", "si los apagones, toda esta atmósfera, da un resultado, si la gente está exasperada" y ello "lo traduce contra el Gobierno o no".