Los magistrados del Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY) se mostraron ayer preocupados por la larga duración del juicio al ex líder serbobosnio Radovan Karadzic, cuyo proceso podría prolongarse "cuatro años o más" si sigue el ritmo que lleva hasta el momento.

El juez que preside el caso contra el líder serbobosnio, O-Gon Kwon, remarcó ayer que todo proceso debe ajustarse a razones de equidad, pero también de tiempo, y que la labor de los jueces es preservar esos principios.

El TPIY celebró ayer una vista preparatoria antes de que el juicio se reanude el próximo lunes tras un receso de dos semanas, que fueron concedidas al acusado para que pudiese estudiar el material que la fiscalía le entregó recientemente con nuevas pruebas, algunas de las cuales podrían ser exculpatorias, según Karadzic.

Esas pruebas están relacionadas con los diarios del ex líder militar serbobosnio Ratko Mladic (todavía prófugo de la justicia internacional), que fueron hallados en la residencia de su esposa.