El entrenador tinerfeño Alejandro Martínez acaba de cerrar su primera campaña lejos de la Isla. Los Soles de Mexicali apostaron por el expreparador del Canarias y estuvieron cerca del título nacional y de jugar la final del torneo continental. En breve volverá "a casa" sin saber cuál es su futuro y su próximo destino. ¿Otra vez México? ¿Europa? ¿La ACB? Más allá de preferencias, le gustaría entrenar allá donde le quieran.

Soles de Mexicali cedió en el sexto partido de los "play offs" por el título liguero. ¿Se han cumplido sus expectativas?

Alcanzar las semifinales de la Liga de las Américas y llegar a la final de la Liga está bastante bien. Estamos muy orgullosos de lo que hemos hecho, pero nos gustaría haber hecho un poquito más. Las lesiones de tres jugadores en el último tramo de la competición nos han "matado". Tuvimos que afrontar el tramo final con los nueve jugadores que nos quedaban.

En la competición doméstica se utiliza un sistema peculiar.

Se juega dos veces consecutivas contra el mismo rival, como local o como visitante. Son 36 jornadas con 10 equipos. Los ocho primeros juegan "play offs". La primera ronda, a cinco partidos; y semifinales y final, a siete.

¿Le gusta?

Es un reto. Si ganas por mucha diferencia, luego tienes que ver cómo motivas al grupo para que sepan la importancia del siguiente partido. Cuando pierdes ves qué cosas puedes retocar para ganar el segundo. Ha sido bastante interesante a nivel táctico.

Hábleme del nivel.

Ha habido menos equipos que otros años. Los buenos jugadores que antes estaban más repartidos, ahora estaban más concentrados en menos conjuntos. Laredo, Garzas, o Monterrey tenían una buena plantilla de jugadores nacionales. Luego llegaron muchos americanos que no estaban antes de la competición. Ha habido bastante nivel esta temporada.

¿Cuál es el aspecto que más le ha sorprendido?

Todo era nuevo para mí. Desde el propio país, la gastronomía... En la competición, la pasión con la que se vive cada uno de los encuentros. Algunos pabellones me gustaron mucho. Hay muy buenos entrenadores. Creo que la competición tiene mucho recorrido para mejorar.

¿Cómo ha llevado el tema de los desplazamientos?

El viaje más cercano, que puede ser quizás ir a Pachuca, son 10 horas. Desde Mexicali no hay muchos vuelos y los que hay son a horas muy malas. Normalmente, nos vamos a Tijuana, que está a dos horas y algo de aquí, y cogemos el avión. Hay algunos vuelos directos: a Monterrey, por ejemplo; pero casi siempre volamos a Ciudad de México, y luego de allí enlazamos con cualquiera de las ciudades donde juguemos.

¿Cuánto cree que pesa esa circunstancia en el equipo?

Pesa sobre todo la ida porque ese día lo pierdes. Prácticamente no puedes entrenar. Al tener que salir de Mexicali a las 11:00 horas de la mañana, se hace muy complicado entrenar antes. Luego llegas al destino muy tarde y tampoco te da tiempo. El día previo al partido casi nunca puedes entrenar o lo haces en unas condiciones muy malas. Por el cansancio, más que por otra cosa. En el regreso también se pierde otro día.

¿Cómo ha sido su relación con la directiva?

Ha habido la misma cercanía que yo podía tener con Aniano Cabrera, con Santiago Chacho o con Félix Hernández en el Canarias. Hemos conectado y trabajado muy bien.

¿Usted es muy familiar? ¿Cómo lleva estar tan lejos?

Lo llevo bien. Soy muy familiar, pero cuando tienes que trabajar y no lo puedes hacer cerca de casa, tienes que ir donde haya oportunidades. Quizás ha sido un poquito lejos para ser la primera vez. Es lo que toca.

¿Y la otra "familia"? ¿Ha podido seguir al Canarias?

He visto algunos partidos porque por la diferencia horaria la mayoría son a las tres y media o cuatro de la madrugada. Ha habido otros que por su importancia los he podido seguir en diferido.

¿Cómo valora lo que se está logrando su exequipo?

Y lo que se va a lograr... Ahora mismo están en la fase más bonita de las dos competiciones. El Canarias juega muy bien, se ha sobrepuesto a las lesiones y sobre todo ha conseguido llenar el Santiago Martín. Quizás era la deuda pendiente que tenía el club. Habíamos conseguido muchas cosas, pero lograr llenos con regularidad era muy complicado. Ojalá sea la semilla que quede sembrada de cara al futuro. Siempre lo he dicho y también lo repiten Txus, Aniano o Félix: con el pabellón lleno es muy difícil ganarle al Canarias.

¿Le sorprende este rendimiento, teniendo en cuenta la grave lesión del a priori jugador franquicia Javier Beirán?

No creo que en el Canarias haya un jugador franquicia. Creo que hay un equipo franquicia. Todos los jugadores son importantes. Javier, como el que más. Pero también es importante Nico Richotti, Davin White, Rodrigo San Miguel o la gente nueva que ha llegado. Fran Vázquez, Georgios Bogris o Aaron Doornekamp se han adaptado muy bien. Las dos lesiones (Richotti y Beirán) han sido muy importantes y han mermado mucho las capacidades ofensivas y defensivas del equipo, pero se ha sabido sobreponer y eso es muy importante. A todo el mundo le sorprende que el Canarias esté ahí arriba, pero en estas fechas nada es por casualidad. Nadie está primero porque te lo regalen. Hace unos años ganamos en Sevilla y durante unas horas fuimos primeros. Eso, entre comillas, es fácil. Lo difícil es ser primero ahora.

¿Qué diferencias y similitudes ve entre "su" Canarias y el actual de Txus Vidorreta?

Hay similitudes porque hay jugadores que estaban y diferencias porque hay jugadores que no. Cada año es diferente. Cambian los rivales, cambia tu propia manera de ver el baloncesto...

Txus alude con frecuencia al pasado para explicar la trayectoria vigente del club. ¿Siente los éxitos actuales como suyos?

Estuve 11 años y medio en el club y contribuí en el tiempo en el que me tocó. Ahora ya no estoy, hay otro entrenador, está haciendo un trabajo buenísimo y consiguiendo cosas muy importantes. Cada uno en su momento tiene que trabajar al máximo para tratar de hacer las cosas lo mejor posible.

¿Piensa en algún momento en que podía haber sido usted el que podía haber estado disfrutando de este presente tan halagüeño?

Disfruté mucho en el tiempo en el que estuve y ahora no pienso en eso. Evidentemente, Vidorreta está consiguiendo cosas que en el tiempo en el que yo estuve no se consiguieron, pero yo también logré cosas que ningún otro había conseguido.

Entiendo que sigue en contacto con la gente del club. ¿Ha llamado a alguien en especial tras el logro del pase a la "Final Four"?

Yo soy más de llamar a la gente cuando lo pasa mal. En los momentos que lo están pasando bien, ganando y consiguiendo cosas, todo el mundo se apunta a caballo ganador. Suelo hablar con prácticamente la totalidad de la gente que estaba conmigo en el club.

El histórico Germán González declaró recientemente que entrenar y jugar en el Canarias es fácil por el ambiente que rodea al club. ¿Está de acuerdo?

Sí. Cuando dejé el equipo dije que era un bombón para cualquiera que viniera. El tiempo me da la razón. Es fácil trabajar porque hay un apoyo muy grande por parte de la directiva. Yo colaboré mucho en que eso fuera así. Durante 11 temporadas, esa continuidad del entrenador, de mucha gente del cuerpo técnico, de muchos jugadores... fue una semilla sembrada que arraigó muy profundamente en los cimientos del club y así se sigue.

¿Por dónde pasa su futuro?

Todavía es muy pronto para decidir nada. Ahora iré a casa unos días. Luego veré si hay alguna posibilidad de seguir trabajando en algún sitio. En Mexicali estoy bien. En algunos días decidirán si creen que me pueden hacer una oferta para continuar. Y, si no, a esperar que pueda salir algo en algún otro sitio.

En cuanto a la Selección Española, ¿podría dirigir nuevamente una inferior este verano?

La verdad es que no lo sé. Cuando llegue a España tengo que llamar a la Federación. Más o menos en estas fechas siempre hablamos. Ha habido cambio de gobierno en la en ella y no sé si querrán contar conmigo.

Usted dijo que sabía que algún día iba a salir del Canarias. ¿Tiene para sí que algún día va a volver?

No depende de mí. Cada día que pasas en un sitio estás más cerca del último día. Estaba claro que algún día iba a salir del Canarias. La cultura de entrenador casi eterno solo se da en algunos casos de equipos universitarios estadounidenses y poco más. La decisión de que yo pueda volver a entrenar en el Canarias o en otro sitio siempre depende de los clubes y de sus rectores. Ahora el Canarias tiene un entrenador con contrato para el año que viene y no hay que darle más vueltas. Lo que quiero es trabajar y lo haré donde haya alguien que quiera que yo trabaje con ellos. Puede ser el Canarias dentro de un tiempo o puede no serlo. Siempre lo digo, adivino no soy.

¿Es mejor entrenador después de esta experiencia?

No lo sé. Digamos que ahora tengo otro punto de vista más, otra manera de ver el baloncesto; conozco otra cultura, otros jugadores y entrenadores. El estar aquí me ha brindado la oportunidad de viajar mucho a Estados Unidos, a ver universitarios y la NBA. Eso te abre la mente a otras maneras de trabajar y a otros sistemas de juego.