El Festival Atlántico de Género Negro Tenerife Noir entregó ayer a Julián Ibáñez el Premio Negra y Criminal de su IV edición con el que reconoce la trayectoria de un autor. El escritor santanderino recogio el sombrero realizado al estilo de los borsalinos en la Librería de Mujeres de Santa Cruz.

Ibáñez y su novela El viejo muere, la niña vive (Cuadernos del laberinto, 2014), protagonizaron previamente, la conversación compartida por las escritoras Berna González Harbour y Maica Rivera, que, junto a Juan Madrid, reflexionaron sobre polígonos, carreteras secundarias y bares de vinos de corcho, a propósito de este título.

Tenerife Noir invita a los participantes en su taller de cine express a rodar cortos de género negro inspirados en la obra del escritor Antonio Lozano. Esta propuesta es un homenaje al escritor grancanario nacido en Tánger, fallecido recientemente, que fue además el receptor del primer Premio Negra y Criminal en 2016.

Dirigida por el especialista y crítico Manuel Díaz Noda, la tercera edición de Tenerife Noir Express citó a los participantes en la Sala de Audiovisuales de Tenerife Espacio de las Artes (TEA), donde desveló su propuesta, que se concreta en basar los cortos en Harraga, Preludio para una muerte, El caso Sankara y La sombra del minotauro, obras de Lozano.