El viceconsejero de Comunicación y Relaciones con los Medios del Gobierno regional defendió ayer su actuación en la adjudicación de la campaña institucional del Día de Canarias, y alegó que es "falso" que existiese plagio del logotipo del 30-M.

Marrero salía al paso así de las acusaciones vertidas por la empresa tinerfeña Calimadigital -de las que se hizo eco este periódico en su edición de ayer-, que participó en el citado concurso y que ha avanzado que denunciará al Ejecutivo por un supuesto plagio de su proyecto para la campaña institucional del 30 de mayo. Según apuntaron fuentes de esta empresa, están estudiando la posibilidad de denunciar bien por la vía administrativa bien por la penal, o por ambas.

El viceconsejero aseguró ayer que "ninguna empresa" conocía las ideas presentadas por las demás, y remarcó que no fueron solo dos, "sino más", las compañías que presentaron propuestas con imágenes de manos "como motivo principal". "Se pueden interpretar similitudes, pero con diferentes estilos", sostuvo Martín Marrero.

A juicio del viceconsejero, unas manos -aspecto sobre el que se centra gran parte de la controversia- "son algo tan común y utilizado comercialmente que no son susceptibles de propiedad intelectual". "Y lo del plagio en cuanto al 30-M es irrisorio: es la fecha de la celebración abreviada, como aparecía el año pasado", añadió.

Según explicó ayer Marrero, las diferencias entre la propuesta ganadora y el resto estriban en aspectos diversos "cuantitativos y cualitativos". "La creatividad final de la campaña se corresponde con la idea propuesta por la empresa seleccionada y presentada públicamente", aseguró.

Además, y en relación con las críticas de Calimadigital sobre la oferta económica -el Gobierno adjudicó el concurso a un proyecto más caro- Martín Marrero sostuvo que "no se trataba de una subasta". "Se valoraban más aspectos, y, en cualquier caso, la diferencia entre la empresa seleccionada y la presuntamente denunciante fue mínima", aseveró.

Es más, subrayó el viceconsejero regional que dada la "reducida" cuantía del presupuesto -8.000 euros-, ni siquiera hubiese hecho falta solicitar propuestas a varias empresas -trece en total-, sino que se podía haber adjudicado directamente a una.