El 85 por ciento de los jóvenes saharauis entre 16 y 35 años no tiene perspectivas de futuro ni posibilidad de una vida autónoma y empleo, según aseguraron hoy los profesores universitarios Marino Alduán, Lourdes Urbaneja y Sergio Ramírez, que visitaron El Aaiún hace unos días.

Según Alduán, decano de la Facultad de Formación del Profesorado de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, la situación es de "desesperación de generaciones enteras de jóvenes", ya que son colectivos "sin ninguna posibilidad de tener una autonomía personal ni de poder formar una familia".

Marino Alduán dijo que viajaron a "los territorios ocupados" para conocer en directo y confirmar las informaciones que, desde distintos medios de comunicación, ONG y fuerzas políticas, se habían manifestado sobre la realidad del Aaiún.

Aseguró que vieron a jóvenes torturados, "comprobamos sus heridas en la cabeza" y relataron que dos de ellos estuvieron inconscientes durante diez días desde el momento de su detención, tras ser arrasado el Campamento de la Dignidad.

Los profesores canarios recogieron testimonios de madres, hermanas y familiares de presos políticos, "porque en estos momentos en el Sáhara ocupado se detiene por intentar exponer el derecho a la libertad de expresión y de asociación".

La comitiva universitaria ofreció un listado de 152 presos políticos en las cárceles Negra (Aaiún) y Salé (Rabat) que, según los familiares, "son personas que reivindicaban en el Campamento de la Dignidad pan, medicinas y viviendas".

Además de la falta absoluta de garantías y de libertades de expresión, de asociación y de reunión, Alduán dijo que se han encontrado con "un problema social gravísimo" y que, ahora, "unos 80.00 saharauis residentes en el Aaiún están por debajo de todos los índices de derechos humanos y de subsistencia que se pueden aceptar".

Resaltó igualmente que no hablan "de oídas", ni a través de documentos, "somos tres profesores testigos de una situación de violación grave de los derechos humanos".

En ese sentido, denunció que el Gobierno de Marruecos no está permitiendo el respeto de los derechos humanos para "cientos de miles de personas, las 80.000 que están en los territorios ocupados y los cientos de miles que están en los campamentos de refugiados".

Sobre las cadenas de rebeliones sociales en el norte de África señaló que se habla de Túnez y Egipto, pero apuntó que "la primera rebelión contra el despotismo", contra la falta de derechos humanos, el hambre, la falta de medicinas y de atención sanitaria, y viviendas, fue el Campamento de la Dignidad, donde 35.000 personas acamparon en jaimas para expresar su reclamación social.

Alduán se mostró crítico con la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental, a la que consideró "cómplice" de una situación que puede ser "un polvorín social y hasta físico".

Los profesores universitarios añadieron que siempre estuvieron vigilados la policía marroquí y temieron ser detenidos a su regreso a la isla ya que un colega suyo francés está privado de libertad en Rabat.