El carné que el Cabildo de La Palma entrega a todos los jubilados y pensionistas de la Isla para viajar gratis en guagua no será universal a partir de este mismo año, sino que para su entrega se tendrá en cuenta la renta de los potenciales beneficiarios, según el estudio que está realizando la Consejería de Transportes para hacer más eficiente el servicio y que antes de su aprobación será analizado por el Consejo Insular de Gobierno y por el Pleno.

En la actualidad, por el simple hecho de ser jubilado o pensionista, también se beneficia a estudiantes, con independencia de los salarios o propiedades, el Cabildo palmero entrega un carné que permite viajar en guagua, sin ningún tipo de límites en su utilización. En la práctica, los mayores no tienen ni tan siquiera que introducir el bono en las canceladoras, a veces incluso no se les exige ni enseñarlo al conductor, un beneficio que cada año cuesta más de 1,2 millones de euros a las arcas insulares.

Ante la crisis y, sobre todo, la prioridad de dar beneficios a las personas que más lo necesiten, la Institución insular está definiendo, según pudo saber EL DÍA de fuentes de la Consejería, las restricciones que se aplicarán, aunque teniendo en cuenta no solo el ahorro, sino además valorando que el uso del carné es clave en el presupuesto anual de la cooperativa Transportes Insular de La Palma, que cubre el servicio regular y que sobrevive en gran parte gracias a la aportación pública, tanto en la adquisición de guaguas como la financiación de rutas.

Reducen líneas.- Entre las medidas a poner en marcha se encuentra el cambio de las canceladoras en los vehículos, lo que se estima que se producirá en el plazo de un mes. Esta situación motivará que los carnés que actualmente tienen los mayores no tengan ninguna utilidad y puedan ser entregados o destruidos. El siguiente paso previsto por Transportes es poner un límite de ingresos, en estos momentos no está definido si superará el salario mínimo interprofesional, para los beneficiarios que recibirán los nuevos bonos, que deberán pasarse por la canceladora en cada desplazamiento, al contrario de lo que ocurre en estos momentos. No solo se mirarán las pensiones de cada peticionario, sino que se pedirá la última renta presentada para estudiar los ingresos por bienes. Además, se producirá un reajuste de líneas, con reducción de kilometraje, es decir, eliminación de rutas para ahorrar costos.

Control de viajes.- Con estas modificaciones, el Cabildo pretende tener un mayor control de los viajes que realizan los mayores, sin descartar que en caso de que se produzca un ahorro significativo, que ciertamente no se descarta, se puedan entregar carné a personas necesitadas, que, por ejemplo, precisen de ir en guagua para acudir a su puesto de trabajo o para asistir a su centro de salud y carezcan de los ingresos suficientes para comprar diariamente el tique de la guagua.