El próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha afirmado hoy que el año próximo reducirá en 16.500 millones el desfase entre ingresos y gastos del Estado para así conseguir el objetivo de déficit del 4,4 % del PIB.

"El panorama no puede ser más sombrío", ha asegurado Rajoy en su discurso de investidura en el Congreso de los Diputados, ya que el pasado trimestre la economía no creció, en el actual "todas las previsiones apuntan al decrecimiento", y en los dos próximos "las previsiones no son nada halagüeñas".

Rajoy ha recordado que, según las previsiones del gobierno socialista en funciones, en 2011 el déficit será de 65.000 millones de euros, 6 por ciento del PIB, una cifra que incluso "puede verse superada", ha advertido, añadiendo que confía en que eso no ocurra.

Por este motivo, el "objetivo y el compromiso al que nos vamos a atener son 16.500 millones de reducción de déficit en 2012", de manera que se alcance el 4,4 % de déficit, lo que cuadra con los compromisos adquiridos con Bruselas.