Un grupo de vecinos de San Andrés, conjuntamente con miembros de la asociación vecinal Los Pedacillos, de El Suculum, ha exigido al Estado, al Gobierno de Canarias, Cabildo de Tenerife y Ayuntamiento de Santa Cruz la urgente protección del frente marítimo de San Andrés. Los vecinos vinculan el incremento de episodios violentos del mar contra la avenida con las obras de ampliación de la Dársena Pesquera, una actuación que ha podido cambiar las mareas, lo que ha propiciado la acumulación de arena en el frente que ha facilitado al mar su descarga contra la avenida marítima.

Lo cierto es que tras años y años de espera y viendo que la virulencia del mar es mucho mayor con el paso de los años, coincidiendo con las obras de ampliación de la Dársena Pesquera, el movimiento vecinal ha tomado cartas en el asunto y ha empezado a tocar en todas las puertas de la aministración, siendo el objetivo prioritario que el Estado, a través de cualquiera de los ministerios u organismos que pudieran estar implicados, tome la iniciativa definitiva para resolver un problema que sufren los vecinos desde que en 1970 se empezara a construir la Dársena Pesquera y la actual autovía de San Andrés.

Protección del frente marítimo.- La premisa que se marcan es, entonces, que "la administración central proteja el frente marítimo de San Andrés y asuma la rehabilitación de su entorno", cuestión que debe ir aparejada innegociablemente con que "las soluciones que se aporten no vayan encaminadas a la privatización del frente costero de San Andrés".

En este sentido, los afectados, asociados y sin asociar, aseguran estar "cansados por la situación que viven, y no solo los vecinos que vivimos en San Andrés, sino los de Anaga en general, que siempre que se corta la avenida tenemos que sufrir para llegar a nuestras casas. Es por ello por lo que pedimos a los políticos responsabilidad sobre un problema que no es nuevo y que con el transcurrir de los años se acrecienta", dicen.

En este sentido, afirman que las olas en la actualidad tienen menos dificultad para entrar en la avenida Marítima y causar destrozos al equipamiento y a los comercios que están allí.

Obras de ampliación y dossier.- Explican que las obras de ampliación de la Dársena Pesquera han provocado "un serie de modificaciones en el comportamiento de las mareas que ha facilitado la concentración de arena en el actual frente de San Andrés. Esta circunstancia ha provocado que la arena se haya convertido en una plataforma para que las olas tengan una menor dificultad a la hora de saltar por encima de la avenida y provocar con mayor frecuencia y gravedad destrozos en la avenida Marítima y en el propio pueblo, ya sea a negocios, viviendas o vehículos".

Sea como fuere, la maquinaria vecinal se ha puesto en marcha y ya el pasado día 7 envió un dosier informativo y reivindicativo a las diferentes administraciones: uno presentado en la Subdelegación del Gobierno dirigido al Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno de España; a la Dirección General de Costas en Madrid; Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife; al Ayuntamiento de Santa Cruz; Cabildo de Tenerife; y otro a nombre del presidente del Gobierno de Canarias.

Reseña histórica.- En ese informe se hace, además, una reseña histórica de lo acontecido con el pueblo de San Andrés y su frente marítimo. En este sentido, recuerdan que en los años 60, el pueblo disponía de un muro de contención que evitaba la entrada del mar. En la década posterior se empezó a construir la Dársena Pesquera y la autovía de San Andrés, con lo que se mejoraron las conexiones, infraestructuras y servicios del pueblo, pero al demolerse el antiguo muro el mar empezó a campar a sus anchas contra el frente cada vez que había mal tiempo. Desde entonces es cuando se reclama la construcción de una escollera de protección.

En los años 90, la Autoridad Portuaria diseña y prevé la construcción mediante la concesión administrativa a promotores privados de muelles deportivos en el frente de San Andrés, siendo estos proyectos modificados debido a la presión vecinal y acabando en los juzgados. Esa misma presión hace que la Autoridad Portuaria ceda el frente marítimo de San Andrés a la Dirección General de Costas.

Ya entrada en la década del 2000, se acometen las obras de ampliación de la Dársena Pesquera en terrenos ganados al mar, unas obras "sospechosas", según los vecinos, de haber provocado modificaciones en el contorno de la costa y en el comportamiento de las mareas, acumulándose la arena en el frente para facilitar la entrada del mar con virulencia en la avenida Marítima.