Arrestados cuatro hombres en el municipio tinerfeño de La Laguna a los que en una operación policial conjunta entre el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Canaria se les han aprehendido dos kilos de hachís, 1.720 gramos en polen, según ha informado en un comunicado el Gobierno de Canarias.

A los detenidos, tres de ellos de origen magrebí y uno canario, se les incautaron cerca de dos kilos de hachís, de los que 1.720 gramos correspondían a 171 cápsulas de polen de hachís, y una tableta de 212 gramos de la misma sustancia. También se les incautaron 1.760 euros, cinco cámaras de fotos, una pantalla de plasma, un ordenador portátil y diez teléfonos móviles.

Este servicio, según el Gobierno canario, es fruto de la actuación coordinada entre los dos cuerpos policiales, se inició hace varias semanas, tras el intercambio de información y ante la preocupación vecinal por el creciente aumento del consumo de sustancias estupefacientes en la zona del "cuadrilátero", en el mencionado municipio.

Los agentes del Cuerpo General de la Policía Canaria montaron un dispositivo de vigilancia en las proximidades de la vivienda de uno de los presuntos vendedores de droga, observándose una presunta transacción, por lo que deciden intervenir y comprueban lo que resultó ser la venta de 15 cápsulas de polen de hachís. Como consecuencia de ésta intervención, se detiene a uno de los implicados en la venta, mientras que el otro logró huir.

Tras instruirse las correspondientes diligencias, y junto con la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía, se solicita mandamiento judicial para el registro de los domicilios de los presuntos delincuentes, en los que se incautaron las cantidades de droga y objetos citados.

Posteriormente, y durante la vigilancia domiciliaria establecida por la noche, se procedió a la detención de los otros tres implicados en esta operación, incluido el que se había dado a la fuga. El detenido en primer lugar, de origen canario, cuenta con numerosos antecedentes por delitos violentos.

Los detenidos fueron informados de sus derechos y trasladados a las dependencias de la Policía Nacional de La Laguna, donde se instruyeron las diligencias pertinentes por un presunto delito contra la salud pública y puestos a disposición judicial.