La complejidad de la apertura del puente de Troya al tráfico rodado, que enlaza las zonas turísticas de Costa Adeje y Playa de las Américas, no sólo se circunscribe a los posibles atascos que se pudieran generar en dicha calzada, sino también a los relacionados con la seguridad vial y del propio peatón.

El alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga, comentó durante el pleno de ayer, a instancias del Partido Popular (PP), que insistía en la necesidad de abrir al tráfico la calzada para potenciar el comercio, que se corre el riesgo de que el puente de Troya se desplome si por el mismo circulan vehículos.

"Existe un informe del ingeniero en el que no se hace responsable si el puente se abre y tampoco podemos estar las 24 horas con la Policía Local en este lugar pesando los coches que quieran acceder por esta calzada", expresó el máximo mandatario adejero.

Rodríguez Fraga, apoyado por el portavoz del gobierno, Marcos Barrera, señaló que "estamos por tanto entrando en cuestiones de seguridad y creemos que no se puede cuestionar" el informe realizado por el técnico.

El alcalde, que sigue mostrando su disposición a negociar con los empresarios de la zona, añadió que "el Cabildo de Tenerife no está por la labor de abrir la calzada y Turismo, antes de la salida del Gobierno regional de sus anteriores responsables, tampoco quería" porque todas las administraciones estaban de acuerdo en que las obras en este lugar deberían "dar prioridad al peatón".

Resaltó que, "a parte del riesgo de caída del puente en el caso de su apertura y el de los colapsos, el pavimento que tiene dicha infraestructura tampoco es el más adecuado y habría que cambiarlo".

"Además, la zona no es más comercial por que pasen los coches" y el empresario debe buscar "fórmulas" para convertir el lugar en un espacio más atractivo para impulsar las ventas, manifestó el alcalde.

Botellón e indemnización

El asunto relacionado con el botellón también volvió a ser punto de debate y desencuentro entre el gobierno local y la oposición, concretamente con el concejal del PP, Andrés Montiel.

Al respecto, el edil aseguró que las medidas no estaban siendo "eficaces porque el botellón se sigue practicando en puertas de hoteles, callejones y comercios".

La argumentación del popular sentó muy mal y el alcalde aseguró que "hemos tomado medidas y hemos erradicado fiestas, por ejemplo, que se habían organizado por internet".

Rodríguez Fraga, que reconoció que todavía queda mucho por hacer, resaltó que se "han cerrado locales que no cuentan con licencias y otros porque no cumplen con el aforo".

Donde no obtuvo respuesta Montiel fue en lo relacionado con los guardaespaldas que tiene el alcalde, quien se negó a responder

Por otro lado, el nacionalista Alfredo Goñi criticó la indemnización de casi un millón de euros que deberá pagar el consistorio por la permuta de unos solares, la cual ha sido anulada judicialmente.