La crisis económica seguirá haciéndose notar en las rebajas que se estrenan hoy en las Islas, donde el gasto medio por consumidor se situará en 55 euros, cuantía que es la más baja del país y está un 39% por debajo de la registrada en la campaña estival de 2009, según la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI).

Este desembolso, cuya estimación resulta de una encuesta, "parece realista", apunta el secretario general de la Unión de Consumidores de España (UCE) en la provincia tinerfeña, Raúl Alonso.

De todas formas, Alonso considera que realizar una previsión de gasto es "complicado", pues en época de rebajas "puede producirse tanto que la crisis sea tal que la gente siga ahorrando y limite sus compras, como que se aprovechen las ventajas de la campaña precisamente porque hay una reducción del comercio ordinario".

Los descuentos llegarán al 70% de entrada, sin esperar -como ocurría en años anteriores a la actual crisis- a las denominadas "segundas rebajas", que se daban a partir de agosto. De todas formas, el presidente de la Federación de Comercio de Tenerife (Fedeco), Luis de Miguel, anuncia que las ofertas pueden incrementarse conforme avance la campaña, que finalizará el 31 de agosto.

Estos abaratamientos, de todas formas, han sido la tónica reinante sobre todo en el último mes, reconocen tanto en Fedeco como en la Federación de Áreas Urbanas de Canarias (Fauca), que confían a pesar de ello en que la temporada oficial mantenga su atractivo.

"Es una de las cuestiones que están por ver en esta campaña", señala el delegado provincial de la UCE, que pone en duda que la mayoría de las tiendas puedan rebajar más sus productos.

El "efecto llamada", indica, puede darse gracias a la publicidad. "Ante el cartel de rebajas, el consumidor cambia el chip; les confiere una calificación diferente, aunque luego en realidad no haya tal diferencia respecto a otros procesos de descuento", expone.

Los grandes distribuidores agrupados en la patronal Asodiscan inciden en que las ofertas previas a las rebajas son "habituales" en épocas en las que el consumo sufre "cansancio" y argumentan que el cambio en el inicio de la campaña consiste en extender los descuentos a toda su gama de productos.

A nivel nacional, alrededor de 100.000 pequeños y medianos comercios dedicados a la moda y complementos y al equipamiento del hogar y la decoración afrontan la campaña con la previsión de facturar unos 3.600 millones de euros, lo que supondría una caída del 10% respecto al año pasado.

El secretario general de la Confederación Española de Comercio (CEC), Miguel Ángel Fraile, aseguró ayer que, pese al descenso de la facturación, las ventas se mantendrán en términos de volumen.

Achacó esa caída a que el nivel de precios es inferior y los mayores descuentos. Según sus datos, cada consumidor gastará 180 euros en rebajas, la mitad en artículos textiles, informó "Europa Press".