Emmasa ha manifestado, con relación a la información publicada ayer sobre la queja de los vecinos de María Jiménez que cogen agua de un chorro público para consumo doméstico, que "es radicalmente falso que el agua en el barrio sea de mala calidad".

Añade que la fuente de la que se abastecen los vecinos "se suministra, mediante tubería, del depósito de Valle Grande. En este depósito, como en el resto de los operativos en el municipio, se somete el agua al mismo proceso de cloración que en el resto. El agua que algunos vecinos recogen en dicha fuente presenta las mismas características de calidad sanitaria que la que llega a sus domicilios".

El agua de abastecimiento de María Jiménez "cumple escrupulosamente con todos los parámetros establecidos por la legislación", como lo acreditan los controles diarios que se realizan.

El máximo valor paramétrico de cloro permitido es de un miligramo por litro, mientras que en el caso de este barrio, "en el último mes arrojan una media de 0,75 miligramos por litro". Respecto a la turbidez, "el máximo valor paramétrico es de 5 UNF y para el mismo periodo se registran mediciones entre 0,11 y 0,61 UNF".

En cuanto a la turbidez, señala que tras unos minutos de reposo desaparece, y que se trata de "un problema derivado de la alta presión en algunas redes terciarias o incluso en las instalaciones internas de las viviendas, una circunstancias sobre las que ha informado en varias ocasiones a clientes y asociaciones de vecinos".