Miembros de la familia de Michael Jackson han asegurado que el cantante recibió "una gran dosis de morfina" justo antes de su muerte, según sostiene el portal TMZ, que ayer dio la primicia de su fallecimiento.

El padre del artista, Joe Jackson, quiso llevar recientemente a su hijo a un centro rehabilitación en Palmdale (California), por lo que él consideraba una "adicción" a la morfina y a fármacos con prescripción médica.

Otros miembros de la familia dijeron que el cantante no estaba preparado para actuar en los próximos conciertos que tenía previstos a partir del 17 de julio en Londres, precisamente debido al uso de esas sustancias.

De hecho, representantes de la gira han comentado al portal TMZ que Jackson se encontraba generalmente en estado "letárgico" y llegaba tarde a los ensayos.

Este portal también asegura que un miembro cercano a la familia de Jackson ha afirmado que al cantante se le suministraba una inyección diaria de demerol, un narcótico similar a la morfina, y que ayer, día de su muerte, Jackson la recibió hacia las 11:30 hora local.

Esa persona cercana al artista añadió que la dosis fue "demasiado grande" y que fue la causa de la muerte.

El abogado de la familia del cantante y amigo personal de éste, Brian Oxman, señaló ayer que no conocía "la causa de todo esto, pero es algo que temía. Esto es un caso de abuso de medicamentos, salvo que la causa sea otra".

"Su familia ha estado intentando durante meses cuidar de Michael, pero la gente que le rodeó permitió que esto ocurriera", agregó.

TMZ añade, por otra parte, que las autoridades están buscando al doctor personal de Jackson, que se encontraba en casa del artista en el momento de la muerte y está en paradero desconocido.