Una visita al caserío de Casas de la Cumbre, en pleno Macizo de Anaga, sirve para disfrutar de un entorno donde la pureza del aire y la belleza de los paisajes son como aislarse de la urbe y perderse en plena naturaleza. El verdor y las múltiples flores son una de las consecuencias de las abundantes lluvias registradas este invierno y pese al frío del monte no hay medicina mejor que pasar unas horas entre su plenitud.

Pero no todo es belleza y bien-estar en Casa de la Cumbre, ya que sus vecinos sufren carencias como en el caso de las vecinas con minusvalías que tienen que recorrer dos kilómetros para tirar la basura porque los contenedores son escasos y están demasiado alejados de las humildes viviendas, las cuales carecen de alcantarillado y vierten las aguas negras al canal. Al hilo, comenta Fulgencio Ramos Jiménez, presidente de la AAVV El Til-Casas de la Cumbre, que "el concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Santa Cruz dijo que íbamos a tener una bonificación del 50% en el pago de la recogida de basuras y se nos sigue cobrando el 100%. Pedimos que la regularidad del paso del camión de recogida sea más a menudo y que dado que se prometió la rebaja, que se cumpla". Pese a que llueve en abundancia, la falta de canalizaciones para el agua de regadío hace que muchos agricultores de la zona hayan tenido que abandonar sus fincas porque no disponen de agua para sus cultivos en verano.

Ramos Jiménez apunta a que "si pensaban que el futuro de Anaga era el Mercadillo de Cruz del Carmen, Anaga no tiene futuro. Dichas dependencias se cerraron y no se han vuelto a abrir porque la gente de aquí ya no planta y no hay nada que vender en el mercadillo".Servicios deficitarios.- Entre los problemas más acuciantes que se registran en la zona está la falta de una red de alcantarillado, y es que "cada vez que levantamos la cisterna se filtra toda el agua en la galería y nadie ha hecho nada para evitar eso", dice Fulgencio Ramos.

El tema de la asistencia médica es otra preocupación entre los vecinos, ya que el médico sólo visita el lugar dos veces al mes y luego acude a Roque Negro. La carencia de un botiquín para disponer de algún medicamento obliga a tener que desplazarse hasta La Laguna si hay alguna urgencia. Asimismo, los vecinos consideran que deben existir 70 puntos de luz más de los que hay y las barandillas de color rojo que hay en determinados lugares para evitar caídas al vacío sólo discurren por determinados tramos quedando otros sin protección alguna y creando sensación de inseguridad a los vecinos mayores o con alguna incapacidad física.Las bombonas .- De hecho, los moradores del lugar solicitan que el camión del gas butano les visite más a menudo, ya que en ocasiones tienen que echar mano de un pequeño tractor propiedad del presidente de la AAVV El Til para que les acerque la bombona, ya que hay caminos que apenas tienen ni medio metro de ancho y son de tierra. Ramos Jiménez pide que el reparto de butano se haga dos veces a la semana, y hay que tener en cuenta que por la orografía de la zona, la mayoría de las viviendas no están "a pie de calle" y prácticamente todas están muy alejadas de la carretera y están habitadas por personas de edad muy avanzada. "Los servicios aquí son de pena y parece que al ayuntamiento no le importa. Al alcalde no le importa y nos sentimos huérfanos. Este ayuntamiento es el peor de todos los tiempos y lo del servicio de guaguas ya clama al cielo".Sin colegio y sin tele.- El colegio de Casas de la Cumbre tuvo que cerrar porque no habían suficientes niños que hicieran posible mantenerlo abierto, pero es que "si no hay ayudas para mantener las casas antiguas nadie quiere venir a vivir aquí ni formar una familia". En el Centro Social de Casas de la Cumbre se encuentra la sede de la AAVV El Til, junto a la ermita de la Virgen de Guadalupe, pero las dependencias vecinales sufren humedades. Fulgencio Ramos echa en falta que si hay alguna cuestión relacionada con el Macizo de Anaga o con el caserío no se les pida opinión al respecto. Un ejemplo es que es necesario hacer más miradores para que los turistas que quieran hacer fotografías puedan pararse y admirar el paisaje porque esos recuerdos son los que se llevan de Casas de la Cumbre. Ramos Jiménez asegura que "cuando se hizo el parque Rural de Anaga se nos explicó que tendríamos una vida mejor y que si se tenían que hacer trabajos nos iban a tener en cuenta, pro no ha sido así y se prima a los que vienen de fuera. En la zona hay profesionales cualificados para muchos trabajos que se han realizado y no se nos ha tenido en cuenta". En varios puntos de la zona no llega la señal de televisión y la radio no se escucha, por lo que la AAVV ha solicitado que se instalen antenas, pero se han rechazo los proyectos dejando aislados a los habitantes.

Una visita al caserío de Casas de la Cumbre, en pleno Macizo de Anaga, sirve para disfrutar de un entorno donde la pureza del aire y la belleza de los paisajes son como aislarse de la urbe y perderse en plena naturaleza. El verdor y las múltiples flores son una de las consecuencias de las abundantes lluvias registradas este invierno y pese al frío del monte no hay medicina mejor que pasar unas horas entre la plenitud del monte.

Pero no todo es belleza y bienestar en Casa de la Cumbre, ya que sus vecinos sufren carencias que van desde vecinas con minusvalías que tienen que recorrer dos kilómetros para tirar la basura, cuyos contenedores son escasos y están demasiado alejado de las humildes viviendas, las cuales carecen de alcantarillado y vierten las aguas negras al canal. Al hilo, comenta Fulgencio Ramos Jiménez, presente de la AAVV El Til-Casas de la Cumbre, que "el concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Santa Cruz dijo que íbamos a tener una bonificación del 50% en el pago de la recogida de basuras y se nos sigue cobrando el 100%. pedimos que la regularidad del paso del camión de recogida sea más a menudo y que dado que se prometió la rebaja que se cumpla". Pese a que llueve en abundancia, la falta de canalizaciones para el agua de regadío hace que muchos agricultores de la zona hayan tenido que abandonar sus fincas porque no disponen de agua para sus cultivos en verano.

Ramos Jiménez apunta a que "si pensaban que el futuro de Anaga era el Mercadillo de Cruz del Carmen, Anaga no tiene futuro. Dichas dependencias se cerraron y no se han vuelto a abrir porque la gente de aquí ya no planta y no hay nada que vender en el mercadillo".Servicios deficitarios.- Entre los problemas más acuciantes que se registran en la zona está la falta de una red de alcantarillado y es que "cada vez que levantamos la cisterna se filtra todo el agua en la galería y nadie ha hecho nada para evitar eso", dice Fulgencio Ramos.

El tema de la asistencia médica es otra preocupación entre los vecinos, ya que el médico sólo visita el lugar dos veces al mes y luego acude a Roque Negro. La carencia de un botiquín para disponer de algún medicamento obliga a tener que desplazarse hasta La Laguna si hay alguna urgencia. Asimismo, los vecinos consideran que deben existir 70 puntos de luz más de los que hay y las barandillas de color rojo que hay en determinados lugares para evitar caídas al vacío sólo discurren por determinados tramos quedando otros sin protección alguna y creando sensación de inseguridad a los vecinos más mayores o con alguna incapacidad física.Las bombonas.- De hecho, los moradores del lugar solicitan que el camión del gas butano les visite más a menudo, ya que en ocasiones tienen que echar mano de un pequeño tractor propiedad del presidente de la AAVV El Til para que les acerque la bombona, ya que hay caminos que apenas tienen ni medio metro de ancho y son de tierra. Ramos Jiménez pide que el reparto de butano se haga dos veces a la semana y hay que tener en cuenta que por la orografía de la zona, la mayoría de las viviendas no están "a pie de calle" y prácticamente todas están muy alejadas de la carretera y están habitadas por personas de edad muy avanzada. "Los servicios aquí son de pena y parece que al ayuntamiento no le importa. Al alcalde no le im y nos sentimos huérfanos. Este ayuntamiento es el pero de todos los tiempos y lo del servicio de guaguas ya clama al cielo".Sin colegio y sin tele.- El colegio de Casas de la Cumbre tuvo que cerrar porque no habían suficientes niños que hicieran posible mantenerlo abierto, pero es que "si no hay ayudas para mantener las casas antiguas nadie quiere venir a vivir aquí ni formar una familia". En el Centro Social de Casas de la Cumbre se encuentra la sede de la AAVV El Til, junto a la ermita de la Virgen de Guadalupe, pero las dependencias vecinales sufren humedades. Fulgencio Ramos echa en falta que si hay alguna cuestión relacionada con el Macizo de Anaga o con el caserío no se les pida opinión al respecto. Un ejemplo es que es necesario hacer más miradores para que los turistas que quieran hacer fotografías puedan pararse y admirar el paisaje porque esos recuerdos son los que se llevan de Casas de la Cumbre. Ramos Jiménez asegura que "cuando se hizo el parque Rural de Anaga se nos explicó que tendríamos una vida mejor y que si se tenían que hacer trabajos nos iban a tener en cuenta, pro no ha sido así y se prima a los que vienen de fuera. En la zona hay profesionales cualificados para muchos trabajos que se han realizado y no se nos ha tenido en cuenta". En varios puntos de la zona no llega la señal de televisión y la radio no se escucha por lo que la AAVV ha solicitado que se instalen antenas, pero se han rechazo los proyectos dejando aislados a los habitantes.