Era conocido por realizar un programa llamado "Salvación con serpientes" en el canal National Geographic. Mientras sujetaba los reptiles, una serpiente cascabel se giró y le mordió en la palma de la mano. El reverendo creía estar protegido por Dios y, según sus creencias, el veneno no podría matarle. Por eso, no aceptó asistencia médica y se marchó a su domicilio. Pocas horas después murió en su domicilio. Su hijo ha afirmado que su padre ya había sido mordido en ocho ocasiones. No es la primera vez que una serpiente le causa la muerte a un predicador durante este tipo de celebraciones.