César Román ha declarado durante horas pertrechado con el sumario como si fuera un abogado hasta el punto de que la juez le ha pedido que deje de hacer referencias al sumario. Román ha ciritcado la instrucción, plagada de errores según él, y ha cuestionado que el torso encontrado en su nave fuera el de Heidi Paz, su pareja. Sobre su relación ha dicho que dejaron de convivir en junio y que desde ese momento mantenían una relación "de amigos con derecho a roce". El día que supuestamente fue asesinada le llamó, pero dice que no quiso verla porque eran las 6 de la mañana. Sobre la maleta en la que un taxista le vio trasladar supuestamente el torso, ha explicado que se han confundido porque él llevó otra maleta pequeña con papeles de su oficina. De la huella en el bote de sosa, con el que se rociaron las prótesis de Heidi para impedir su identificación, no ha tenido argumentos de defensa.