El papa León XIV no ha aceptado el reto del número 1 del tenis mundial Jannik Sinner. Lo ha recibido en audiencia y el tenista le ha propuesto, bromeando, pelotear en el mismo Vaticano, pero el papa ha declinado la oferta para no romper algo, ha dicho. Sinner le ha regalado una raqueta como la suya y ha charlado con el pontífice, que se ha confesado un apasionado del tenis.