Riachuelos regando la vertiente este del Risco de La Concepción (Breña Baja), que linda con Santa Cruz de La Palma; o la TF-1 colapsada por los problemas de drenaje a la altura de Granadilla de Abona. Son tan sólo algunos de los efectos colaterales que está dejando en Canarias la borrasca 'Filomena'. Muchos ayuntamientos han recomendado a la población no salir de sus hogares si no es estrictamente necesario.