Por primera vez hacemos el tradicional gesto de cambiar la hora del reloj en plena cuarentena. Entrar en el horario de verano supone una serie de efectos a los que ahora se unen los de estar encerrados en casa. "Lo más importante es mantener la higiene del sueño, las personas que mantienen la higiene del sueño tienen mejor capacidad adaptativa", explica José Antonio Galiani, director del centro psicosanitario Galiani. Porque ahora, los días son más largos y no se puede salir a la calle. Un ajuste algo más complicado de lo normal por la situación que estamos viviendo. En octubre recuperaremos la hora que hemos perdido esta madrugada. Esperemos que para entonces hayamos recuperado también la normalidad.