Al cumplirse un año del crimen del pequeño Gabriel Cruz en la provincia de Almería, sus padres han comparecido en rueda de prensa y han contado cómo ha sido para ellos este año. Las palabras de Ángel han sido desgarradoras: un año de remordimientos, de culpa. Patricia le ha hecho continuos gestos de cariño. Él ha vuelto a trabajar para no pensar tanto; Patricia no ha podido y ha tenido que mudarse de casa. También han querido aclarar que sí piden la Prisión Permanente Revisable para la asesina de su hijo, y han mostrado su apoyo a las familias que la piden, aunque ellos no tienen todavía fuerzas para sumarse a esa lucha.