Riadas de jóvenes británicos han tomado las calles y los bares en la segunda noche de esta fiesta. La convocatoria, en principio, es deportiva. Pero se convierte en una fiesta con disfraces y mucho alcohol. Aunque no se consume en la calle, también deja sus efectos. Toda una exhibición peculiar en Salou que tendrá un parón de varios días debido a la Semana Santa.