El termómetro echa fuego. Lleva dos días superando los 40 grados. Una vez asumido el calor, combatirlo es de manual. Hidratarse es fundamental. A la vista está que lo saben hasta los más pequeños. Sin embargo son ellos y las personas como Manuel, de 97 años, los que más cuidad otienen que tener. Jesús Bravo, médico del Hospital Nissa, asegura que “pierden el mecanismo de la sed y entonces hay que obligarles a tomar agua”. El segundo mandamiento lo llevan a rajatabla los turistas: no saldrás sin un gorro y unas gafas de sol. El tercero, lo seguimos todos. Observen: la sombra repleta, por el sol no hay nadie. Evítenlo. Y el último consejo: no harás lo mismo que Manuel. Hay que evitar hacer deporte a pleno sol. Consejos básicos para un calor especial.