La pareja todavia están temblando. Tres desconocidos les sorprendieron en la cama, a las 6 de la mañana, cuando aun dormían. Les golpearon y les ataron de pies y manos con unas bridas. A Salvador, que no puede andar, han tenido que vendarle los brazos por las heridas que le han causado los anclajes. Después los amordazaron. Salvador y Josefa aseguran que llegaron a temer por sus vidas. Mientras uno les amenazaba con un cuchillo, los otros dos revolvían toda la casa buscando el dinero