El Sambódromo de Río de Janeiro abrió anoche sus puertas para dar inicio al desfile de carnaval más famoso del mundo. 78.000 espectadores han disfrutado del mejor hacer de las escuelas de samba, trece de las cuales competirán por convertirse en la mejor del año. Cada una de ellas la forman entre entre tres mil y cino mil bailarines, y suelen gastarse para este día entre 2 y 5 millones de dólares. Todo para seguir siendo el espectáculo más popular del mundo.