A partir de una foto de la infancia, la fotógrafa argentina Irina Werning es capaz de captar el paso del tiempo. Patrick, 30 años después sólo ha perdido pelo, el pelo que ha ganado Matías. Lali por fin se ha subido a los tacones y a Pancho le han salido todos los dientes. A Celine ya no le quedan grandes las botas, en cambio a Fer se le ha quedado pequeña la puerta. Y en la foto de Carli ahora son dos.