Es la nueva estrategia de la Generalitat: sustituir los lazos amarillos por cualquier otro símbolo del mismo color. De momento triunfan los elementos de fauna y flora: en la Consejería de Agricultura hemos visto pegatinas con ovejas, vacas, cerdos, peras, mariposas, mariquitas… cualquier cosa vale para burlar las órdenes de la Junta Electoral de retirar los lazos amarillos –símbolo del independentismo- en época preelectoral.