Llevarlo mal puesto es tan peligroso como no usarlo. La DGT quiere recordar la importancia de usar el cinturón y durante una semana ha vigilado a los conductores. La campaña se ha saldado con 4.500 denuncias, de las que 266 eran a padres que llevaban a sus hijos sin ningún tipo de retención infantil. Y una cuarta parte de ellos iban en el asiento delantero. El 75 por ciento de los conductores han sido multados en carreteras secundarias. Y más de 700 eran conductores profesionales.