Carmen Alborch fue la última ministra de Cultura de Felipe Gonzalez y seguramente una de las mujeres políticas más empáticas y luchadoras. Hoy ha muerto en Valencia, en su tierra. Hace 15 días nos dejó una enorme sonrisa y un gran abrazo con Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno le entregó la más alta condecoración de la Generalitat Valenciana. Ese día dijo que seguiría luchando hasta el último suspiro por construir un mundo mejor.