La Mezquita de Córdoba fue inscrita en 2006 por la Iglesia en el registro de la propiedad. Lo hicieron por 30 euros. Una inscripción que no se hizo pública, pero en 2009 los cordobeses se enteraron de ello. La Iglesia se había acogido a la reforma que el Gobierno de Aznar hizo de la Ley Hipotecaria: les otorgaba el privilegio de inscribir con total libertad lugares de culto que no estuvieron registrados y sin necesidad de aportar títulos de propiedad y así ocurrió con la Mezquita.