Luz verde cuarenta y dos años después para que los restos de Franco recorran el camino inverso. Así lo aprobó ayer el Consejo de Ministros por Decreto ley y así lo recoge hoy el boletín oficial del Estado. Se inicia un periodo de un año para llevarlo a cabo, periodo que el Gobierno no tiene intención de agotar. Antes, la familia, tendrá 15 días, una vez inciado el trámite, para decidir el destino del dictador. Y así lo harán, según ha manifestado a La Razón su nieto Francis Franco, Si no es así... la decisión del lugar la tomaría el Gobierno. Llegado el momento de la exhumación, lo primero será retirar la pesada losa, los 1500 kilos que mantienen bajo tierra al dictador. Una vez apartada la losa los operarios tendrán que extraer el ataud valiendose de cuerdas o cables. Cuando el ataud salga a la luz el dictador se verá rodeado de caidos de la guerra civil, de la 33847 víctimas con las que ha compartido lecho y que le harán pasillo mientras recorre los poco más de doscientos cincuenta metros que separan la QUE FUE LA tumba del dictador DESDE FINALES DE 1975 de la explanada. Franco tomará entoncer rumbo a su nuevo destino lejos de las víctimas tal como lleva años solicitando la ONU.
