Los 87 migrantes que navegan a bordo del Open Arms no recibirán el mismo trato que los 630 que llegaron a bordo de Aquarius. Aquellos tuvieron un permiso legal de 45 días de estancia en nuestro país, asistencia legal y de traductores. Las personas que huyen de Sudán en el Open Arms sólo tendrán 72 horas antes de recibir una orden de expulsión de España. El Gobierno dice que el caso del Aquarius era una emergencia humanitaria.