Todos los ojos estaban puestos en Pedro Sánchez, pero para entender el éxito de la moción censura había que mirar a la tribuna de invitados. Y ahí estaba Iván Redondo. 37 años, consultor político y desde hacía un año se había convertido en estrecho colaborador de Sánchez. A él se le atribuye la cocina de la estrategia de esa moción.