Julián Sánchez Melgar es magistrado del Tribunal Supremo desde el año 2000. Llegó al alto tribunal con el respaldo de los vocales del consejo general del poder judicial propuestos por el PP. Tiene 62 años, perfil conservador y dará continuidad a la tarea de Maza al que le unía una gran amistad. El nuevo fiscal tiene fama de técnico y prudente.