La muerte de Fidel Castro puede marcar un antes y un después en la política interior y exterior de Cuba. O al menos así lo creen diversos gobiernos en todo el mundo, que piensan que la pequeña isla caribeña seguirá con su proceso de apertura tras el fallecimiento del histórico presidente. Las relaciones entre Cuba y España han pasado tanto por buenos como por malos momentos desde que Fidel llegó al poder.