Felipe VI ha cerrado su discurso volviendo a insistir en el "entendimiento y el espíritu de unión" como piezas claves en el futuro cercano de España. "Los españoles nunca nos hemos rendido ante las dificultades, que han sido grandes, y siempre las hemos vencido. Y sabemos, además, que tenemos que seguir caminando con la voluntad de entendimiento y con el espíritu de unión a los que me refería al principio. Con diálogo y con compromiso, con sentido del deber y con responsabilidad; sintiendo y viviendo, cada día, cada uno de nosotros, ese compromiso ético que hace grande a un pueblo; uniendo nuestros corazones, porque hace décadas el pueblo español decidió, de una vez por todas y para siempre, darse la mano y no la espalda"